miércoles, 3 de febrero de 2010

Cronica de una mañana lluviosa

Hoy me levante esperando ver al sol entrando por mi ventana, cual mañana comun de verano, pero ¿cual fue mi sorpresa? lluvia, como los ultimos 3 dias, ¡lluvia!, -no hay pedo- me dije a mi mismo mientras daba brinquitos para poder llegar a mi closet, evitando el frio piso, -igual te vas a quedar todo el día en la oficina, no te mojarás- me reconforté a mi mismo, me puse los pantalones, la camisa y 2 sudaderas encima- hará harto frío, cubrete- y me hice caso, baje como usualmente lo hago, tomé las llaves del coche y abrí el portón -no te mojes los pantalones- me dije a mi mismo mientras me lamentaba por ser parte de la moda de "pantalones de trapeador", dado a la forma que tiene la parte cerca de los zapatos, puros retazos de tela.

Me subí al carro y lo prendí - no manejes rápido que luego te derrapas- dicho y hecho me fui con todo el todo el cuidado posible, aunado a la cantidad abismal de trafico y la pendejez de la gente, llegué a mi primer destino - que pedo bato, ya llegue- le dije a Paco, mi mejor amigo por telefono, esperé a que bajara, prendí el motor de nuevo y nos dirigimos a nuestro destino, procure no bajar la ventana en ningun momento - no me vaya a mojar- lo que ocasionó que el parabrisas se empañara -ni pedo tienes servilletas, limpialo- de poco sirvieron ya que lo embarrado seguía ahí, -bueh ya casi llegas- estacioné el carro frente a la oficina, bajamos del coche, procure taparme para evitar mojarme, camine cuidadosamente por la calle como si estuviera evitando las gotas de lluvia, llegué hasta el portón -bien lo lograste, no te mojaste casi nada- entra primero Paco.

-PUTA MADRE- se oye mi grito por toda la cuadra

Mi pie estaba dentro de un charco.